jueves, 22 de abril de 2010

Padezco de falta de diplomacia aguda.

¿Es grave?

miércoles, 21 de abril de 2010

Han publicado hoy una entrevista que me hicieron hace unas semanas para www.valonsadero.com, el enlace es éste:

http://www.valonsadero.com/reportajesENTREVISTAS/index.php?id=17

Aunque es un poco larga, me gustaron las preguntas que me envió la periodista a partir de mi currículum, así que intenté contestarlas lo más sinceramente posible y ahí está, para quien tenga un poco de paciencia e interés.

miércoles, 14 de abril de 2010

¡Aguacates, maduro, aguacates!

El cantogrito del señor que vende por la calle aguacates y plátanos se cuela ahora por mi ventana.
El afilador tico toca la misma melodía que el español. Tengo la ventana abierta y entra el canto de mi pájaro favorito, el de la tripa amarilla que no sé cómo se llama,  el aullido del perro de enfrente que se parece al de los lobos, el pitido del único tren operativo en Costa Rica y que atraviesa la ciudad a diez por hora pasando junto a mi casa, la alarma intermitente de una de las casasquetienenmuchoqueocultar de mi calle,  motores de algunos coches, y voces de vez en cuando que me recuerdan que vivo en un segundo piso muy cerquita del suelo.

Intento concentrarme en criticar la respuesta del ministerio de vivienda al terremoto que hubo el año pasado cerquita de San José, y leo en El País que otro terremoto ha sacudido fuerte a miles de personas, esta vez en China. Entonces borro unas líneas de mi informe (sistematización, dicen aquí). Dudo si sirven de algo los protocolos, los diseños de vivienda de emergencia, los albergues temporales, la rápida atención a la población, etc. El mundo está temblando fuerte y cada vez más a menudo.

Javi y yo hablamos hace días de cuál es la mejor opción en caso de terremoto (hace dos semanas tuvimos dos temblores flojitos dos días consecutivos):  saltar por la ventana al sur y caer en el jardincito de la vecina de abajo (hay unos 8 metros, calculo, pero tengo mis dudas sobre si me atrevería a saltar, ¡con el vértigo que tengo!), bajar por la escalera (riesgo seguro) o quedarnos dentro de casa buscando el muro y la esquina más estable. Pues no sabemos. Hace poco un amigo chileno nos contó que sus padres estaban en la cama cuando ocurrió el terremoto, y sólo se cogieron de la mano y esperaron. Qué fuerte, ¿verdad?

Pues después de estas reflexiones positivas mañaneras, voy a seguir con mi sistematización, poniendo un poco verdes a los políticos y políticas que no hacen nada mientras la gente que perdió su casa hace más de un año sigue en viviendas temporales (algunas familias, ni eso).

*Téngase en cuenta que no me he pronunciado sobre la coordinación interinstitucional en la atención y reconstrucción postdesastre , ni he mencionado que trabajo en una agencia de naciones unidas dedicada al hábitat que no participó en ninguna de las labores relacionadas con el terremoto.